Our Ministry in Santo Tomas / Nuestro Ministerio en Santo Tomas
Within two kilometers of our base, one will find a small space of flat ground used as a football pitch in a poor district called Santo Tomas. Once a week, in this tiny area of dirt, the kids of Santo Tomas are given the opportunity to enjoy their favorite recreational pastime: football. Every Wednesday afternoon, the sports ministry organizes a game of football for them. After separating the children into two teams, the whistle is blown, and the ball is kicked-off. Until the sun begins to slide down the back of the mountains, we look after the kids as they pass hours of enjoyment playing football. In the past, the children were rowdy and disrespectful, and in every game we organized, a fight would break out, or an insult would fly out, but after investing our time in their lives, we have seen the fruit of our work. The kids have learned to be obedient, patient, and have self-control.
A dos kilómetros de nuestra base, en el humilde vecindario de Santo Tomás, se encuentra un pequeño espacio de tierra plana. Cada miércoles por la tarde el ministerio de deportes organiza un partido de fútbol, transformando ese espacio vacío en una cancha para los chicos del barrio brindándoles, de esa manera, la oportunidad de disfrutar de su pasatiempo favorito: el fútbol. Después de separarlos en dos equipos, suena el silbato y se patea la pelota. Desde ese momento, y bajo nuestro ojo vigilante, los chicos disfrutan del fútbol, hasta que se pone el sol. Al principio no nos hacían caso, eran maleducados y no pasaba un partido sin que comenzaran una pelea o volara algún insulto. Sin embargo, después de haber invertido nuestro tiempo y nuestro corazón en sus vidas, comenzamos a ver el fruto de nuestro trabajo: ahora son obedientes, pacientes y aprendieron a ejercer tener dominio propio. Después de invertir nuestro tiempo en los corazones y las vidas de estos niños, es evidente que a través del fútbol, los niños no sólo disfrutan, sino que también tienen la oportunidad de ver a Dios.
Que lindas las fotos!
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